El calzado es un elemento imprescindible de nuestro día a día, pero ¿sabías que puede influir en nuestra postura y, por tanto, en la salud de nuestros pies y espalda? En este artículo, vamos a detallar de qué manera el calzado puede afectar a la postura y cuáles son los mejores zapatos para evitar problemas posturales.
El tipo de calzado que utilizamos puede alterar la posición de nuestros pies y de nuestra columna vertebral. Por ejemplo, el uso de tacones altos o zapatos con punta estrecha puede provocar que los pies se desplacen hacia delante y que la columna se curve hacia atrás, generando dolor en la zona lumbar y otros problemas posturales. Asimismo, el uso de zapatos con suela gruesa y sin soporte puede inclinar los pies hacia los lados, afectando al equilibrio y la postura.
Para evitar estas consecuencias negativas, es fundamental elegir el calzado adecuado. En este sentido, lo más recomendable es optar por zapatos cómodos y funcionales que proporcionen un buen soporte y amortiguación. Si necesitas llevar tacones, elige aquellos que no superen los 3 cm de altura y que tengan una base amplia para garantizar una buena estabilidad. Por otro lado, si tienes pies planos o arcos caídos, es recomendable utilizar plantillas ortopédicas para mejorar el soporte y distribuir mejor el peso del cuerpo.
En conclusión, el calzado puede afectar de manera significativa a nuestra postura y, por ende, a nuestra salud. Escoger el calzado adecuado para cada ocasión puede evitar molestias y problemas posturales a largo plazo. En nuestra clínica, te ofrecemos asesoramiento personalizado para ayudarte a elegir el calzado que mejor se adapte a tus necesidades. ¡No dudes en contactarnos!